Yo vi la oruga salir de su envoltura
De seda la envoltura y la oruga
Y sentí a su través la fuerza de la vida
Sin por qué, sin a dónde
Sin ni por qué siquiera
Y yo salí con ella de su cárcel de seda.
Hermana tuya soy, oruga, vivo en ti, tu en mí vives
Enséñame a esperar mi cambio inmóvil
Y a aceptar mi destino,
A sentir la llegada de libre mariposa
A seguir la llamada que señala el camino
Y a romper sin piedad las ligaduras
Que me impidan seguirlo.
Sufres, callas y vences
Con placer, con dolor…
Vida, cambio de vida
Ruta marcada, azar,
¡Tan frágil carne eres!
Un solo dedo, amiga, te podría aplastar.
Abonarás la tierra descompuesta,
Te comerán las crías de las aves,
O pestíferos virus devoradores de hombres
Si se rompen tus ansias de volar, mariposa
Que transporta sus hijos,
Espejo de mi misma.
Tu dios mi dios, tu vida ¡tan cerca de la mía!
En tu vivir me miro,
Amiga…